Pasamos la vida soñando...
De día, estando en estado de vigilia, pasamos constantemente pensando de forma inconsciente y sonámbulica, deseos o recuerdos.
Por las noches, lo que hemos deseado y no satisfecho durante el día, lo vivimos de forma muy real mientras dormimos, pero esta vez, acalorados por la oscuridad, representado en claras imágenes.
Ambos, pensamientos inconscientes diurnos e imágenes del inconsciente nocturnas, sin ningún tipo de diferencias, son llamados, sueños.
En una palabra, el hombre contemporáneo, vive soñando de noche y de día, incapaz de concretar su sueño en la materialidad, perdido entre los propios sueños que constantemente proyecta.
Y se entiende el porqué sus sueños, principalmente, el sueño de la libertad espiritual, o libertad del sufrimiento humano, hasta hoy, no se ha podido materializar; porque...
“para que un sueño se haga realidad, primero, hay que...DESPERTAR…”.
¡Om Namah Shivaya!
Eduardo Escuela de Misterios
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