"...Para Amar Verdaderamente,
se requiere de un héroe
que sepa manejar su propio miedo."
que sepa manejar su propio miedo."
"...Cuando nuestra vida es demasiado controlada,
cada vez habrá menos vida que controlar..."
Hay un hábito arraigado entre las personas consideradas “espirituales”, de usar la frase “dejar fluir”, sin conocer el significado y las condiciones en las que este “dejar fluir” se manifiesta.
Para pretender vivir fluyendo con la Vida, tendríamos que haber hecho primero, el trabajo de trasmutar el cuerpo emocional o astral, por la paz espiritual interior, haber adquirido determinado grado de consciencia, o haber despertado, para que verdaderamente, pudiésemos fluir en cada situación que la vida nos presenta, y no, ser arrastrados por las emociones del inconsciente, el que cada vez que decidimos fluir, en realidad, interfiere y sabotea, todo deseo consciente de la persona que se dispone a fluir.
El término fluir, proviene del ejemplo de un río, donde las olas superficiales, no afectan la tranquilidad interior de ese río; el objetivo espiritual al que el ser humano, se propone alcanzar; poder permanecer impasible por dentro, y actuando o haciendo aquello que debamos hacer en nuestra vida externa diaria.
Pero en un fluir, en donde externamente no hacemos nada, y nos dejamos llevar por la corriente, no podremos llegar adonde nos hemos propuesto llegar.
En vez de eso, cada vez que “decidamos fluir” con las situaciones de la vida, teniendo aún como acompañante, a nuestra mente inconsciente, ese mismo inconsciente, se encargará de trancar, sabotear e ir en la dirección opuesta a la que el sujeto consciente se proponga ir.
No deberíamos repetir las frases espirituales, hasta ver si ellas son puestas en práctica y superan todas las adversidades que se proponen superar; o conquistan todo lo que se han propuesto conquistar o conseguir en este mundo.
Eckart Tolle nos dice al respecto del fluir o del aceptar, que si se nos pincha un neumatico en un viaje, debemos aceptar esa situación interiormente, pero luego, externamente, arremangarnos las mangas y tomar las medidas del caso, y no como muchos piensan, aceptar el accidente, y quedarnos de brazos cruzados... ".
"FLUIR, NO PUEDE SER CONFUNDIDO CON HUIR..."
Om Namah Shivaya
Agradecimientos: Eduardo Ser Escuela de Misterios
Bendice a quién te abandona,
porque te devuelve a tí mism@
A.Jodorowsky
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